No, la esclavitud no es cosa del pasado. En pleno siglo XXI el comercio de personas (trata de personas es la fórmula política empleada) no sólo no ha decaído sino que ha aumentado. Según los datos del Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado, este negocio mueve cinco millones de dólares cada día, siendo el más lucrativo solo por detrás del tráfico de armas y de drogas. En España se calcula que unas 45.000 mujeres (el 80% de las personas con las que se comercia son féminas) son víctimas de trata y la gran mayoría (90%) son obligadas a ejercer la prostitución.