Valérie May forma parte de un movimiento en España que defiende el trabajo sexual por voluntad propia. «No quiero seguir en este sistema laboral», añade. Natalia Ferrari soportó sólo tres días trabajar en un McDonald’s. «Debería haber empezado a prostituirme mucho antes», se lamenta.
Noticia completa: http://www.elespanol.com/reportajes/grandes-historias/20161201/174983263_0.html